Como expresar en palabras todo lo lindo que vivimos en Anchimalen: exquisitos desayunos con jugo de naranja, dulce, paty canasta, asado, paseos en Jeep, tardes de mate y juegos; y la infaltable sonrisa de Carla detrás de la compu, la calidez de Adriana corriendo a hacerle el sandwich a Fede o calentando el agua para el mate, y la buena onda de Renato siempre dispuesto a contarnos una anécdota divertida.
Nos llevamos los mejores recuerdos de una vacaciones inolvidables. Les dejamos nuestras sonrisas flotando en los pasillos, nuestras ganas de volver pronto y por supuesto nuestra amistad.
Gracias por tanta dedicacion, por tanto afecto y por tanta paciencia. Los queremos!!!
Hector, Alicia, Fede y Roxana